2150

Tras horas remando, la idea del paseo en kayak ya no le parecía tan divertida.

Liath

2149

En el tiempo de la cosecha, mientras sus vecinos recogían las hortalizas de sus huertos, Luisa hacía lo propio con las estrellas caídas en el suyo.

Liath

2148

Al fin tenía el piso con aquellas hermosas vistas de la ciudad, que tanto había gustado a Ana.

Solo faltaba ella...

Liath

2147

Aquella relación a tres bandas tenía sus ventajas, y no sólo en lo referente al sexo.

Habría aprendido a conocerlas y amarlas como nunca pudo antes.

Liath

2146

Lo último que veía antes de dormir, y lo primero al abrir los ojos, era aquel impresionante dragón que decoraba la espalda del ser que había llegado a querer más que a sí mismo.

Liath

2145

Siempre había tenido olfato para aquellas situaciones y, esta vez, volvía a notar el peligro emanando de él.

Liath

2144

La primera vez que la vio recogía flores de un árbol de su jardín y supo que su vida no estaría completa sin ella a su lado.

Liath

2143

La mirada de Simón la seguía con una muda acusación, al permitir la entrada al extraño que le hizo daño.

Liath

2142

Según la adivina, la carta indicaba que podría pedir perdón y restablecería las relaciones dañadas.

Pero conociendo a Marcos dudaba de que eso fuera posible.

Liath

2141

Bajo los cuidados de Jairo, Susana no sólo se recuperó de sus heridas.

Se abrió como flor en primavera por primera vez en años.

Liath

2140

Con firmeza, pero con la delicadeza de quien trabaja con algo sintiente, Lya fue quitando capas hasta dejar al descubierto lo que poblaba su mente.

Liath

2139

Desde su improvisada cama, el recién llegado observaba a los humanos que trataban de curar sus heridas.

Liath 

2138

El tapiz representaba un amor inmortal de esos que ella creyó tener y que, ahora lo sabía, resultó tan falso como el origen del tapiz.

Liath

2137

Aún sabiendo que era imposible, me quedé un rato observando la playa.

Esperaba a que Jaime apareciera, sonriente como siempre, y corriera a buscarme.

Liath

2136

Al fin y al cabo eso era la vida, ¿no?

Aprovechar y atesorar los buenos momentos y superar y aprender de los malos.

Liath

2135

En los posos del té consultó su futuro, pero las señales eran tan confusas que no consiguió entender el mensaje.

Liath

2134

Se había convertido en el tipo de persona que más detestaba y del que más había protestado.

Y no le importaba en absoluto.

Liath

2133

Marga sonreía al fin.

Y todos, incluidas sus mascotas, estaban contentos con el cambio.

Liath

2132

Cuando Jim llegó a mi vida no creía que pasáramos de ser buenos amigos, si congeniábamos.

Con su infinita paciencia y mucho cariño logró que olvidara el daño pasado y volviera a confiar.

Liath

2131

Sentado en la calle esperaba a que su mejor amigo volviera a casa para contarle lo ocurrido.

Él sabría que hacer.

Liath

2130

Nunca pensó en Lía como pareja; hasta aquel momento nunca pensó en que le atrajeran las mujeres.

Pero ejercitándose en las artes mágicas surgió entre ellas "la chispa".

Liath

2129

Saeta observaba atentamente los movimientos de Luis.

Temía que, en su prisa, la dejara nuevamente atrás.

Liath

2128

Inspirada por el espíritu primaveral, y tal vez, por el vino, vio a las hadas salir de las flores del jardín.

Liath

2127

No sabía si los hechizos serían efectivos o no, pero en el fondo, eso era lo menos importante.

Eran hermosos y divertidos, sobre todo cuando los hacían juntos.

Liath

2126

Creía que la marcha de Susana me hundiría, pero la compañía de Lila y Zeus mitigó el dolor.

Liath

2125

Era una tontería, porque Pedro aún no se enteraba de nada; pero a todos les hizo ilusión que el abuelo se disfrazara para el pequeño.

Liath

2124

Creyó que con Kim encontraría lo que tanto anhelaba, pero ella puso su vida del revés y se marchó sin despedirse.

Liath

2123

El oscuro guerrero fue en busca de sus compañeros, a pesar de las pocas posibilidades de supervivencia.

Liath

2122

En la esperada cosecha todos tenían un propósito y un trabajo, pero no tan bien compensado como algunos esperaban.

Liath

2121

Los murciélagos no eran sus animales favoritos, pero no le causaban tanto pavor como a Ana.

Sin embargo, el que se acercaba a ella consiguió ponerle los pelos de punta.

Liath